Es tema discutido la extensión que tuvo el ámbito lingüístico euskérico en la antigüedad y Alta Edad Media. Algunos estudios apuntan a que llegó a abarcar un área territorial que se extendía desde el golfo de Vizcaya hasta el Pirineo catalán, incluyéndose en dicho ámbito los territorios de la hoy Gascuña, La Rioja, norte de Soria, este de Cantabria, norte de Huesca, nordeste de Burgos, noroeste de Zaragoza y parte de la provincia de Lérida, así como parte del actual departamento francés de los Altos Pirineos.43 Otras opiniones defienden que la versión primitiva del actual euskera tiene su origen en la región de Aquitania y creen que sería ya en tiempos históricos cuando se produjo su expansión a los territorios españoles en los que se habla actualmente.44 Durante los siglos VIII y XI se estima que el euskera vivió un segundo periodo de expansión, extendiéndose por territorios de la Rioja Alta y la provincia de Burgos, periodo del que la toponimia claramente euskérica de estas áreas (Herramélluri, Ochánduri, Bardauri, Sajazarra, etc.) sería una prueba.
En la actualidad, dentro de España el euskera es hablado como primera o segunda lengua en las tres provincias del País Vasco (Álava, Vizcaya y Guipúzcoa), en la Comunidad Foral de Navarra, en el enclave de Treviño, Comarca del Ebro (Castilla y León) y en el Valle de Villaverde (Cantabria).
En la totalidad del territorio de Guipúzcoa, en el centro y oriente de Vizcaya, así como en algunos pocos municipios del norte de Álava y en el tercio septentrional de Navarra, el euskera es la lengua tradicional de la mayoría de la población. Por el contrario, en el occidente de Vizcaya (Las Encartaciones y Gran Bilbao) y en la mayor parte de Álava y Navarra, en el enclave de Treviño y en Valle de Villaverde, la lengua tradicional es el castellano.
Dentro de Francia el euskera es hablado en los territorios de Labort, Baja Navarra y Sola, comúnmente denominados en conjunto como País Vasco francés (Iparralde en euskera, ‘Zona Norte’) e integrantes junto a Bearne del departamento de Pirineos Atlánticos. El euskera es la lengua tradicional predominante de Baja Navarra (excepto el enclave gascohablante de La Bastida de Clarenza), de Sola y de la mayor parte de Labort, en tanto que el extremo noroccidental de este último territorio, donde se encuentran las ciudades de Biarritz, Anglet y Bayona, es predominantemente francófono en la actualidad, y se hablaba idioma gascón anteriormente. Para el caso del País Vasco, los datos de la VI Encuesta Sociolingüística (2016)45 realizada conjuntamente por el Gobierno Vasco, el Gobierno de Navarra y la Oficina Pública del Euskera del País Vasco francés, señalaba que un 33,9 % de la población mayor de 16 años era vascohablante bilingüe (631 000 habitantes), un 19,1 % vascohablante bilingüe pasivo (356 000) y un 47 % era castellanohablante exclusivo (877 000). Según ese estudio, el número de vascohablantes era mayoritario en Guipúzcoa (50,6 % de vascohablantes bilingües, 20,4 % bilingües pasivos, 32,1 % castellanohablantes exclusivos) y minoritario en Vizcaya (27,6 % bilingües, 17,8 % bilingües pasivos, 52 % castellanohablantes monolingües) y Álava (19,2 % vascohablantes bilingües, 18,4 % bilingües pasivos y 62,4 % castellanohablantes monolingües).46 Los datos muestran una tendencia de aumento del número de vascohablantes bilingües y bilingües pasivos y un descenso de monolingües castellanohablantes en los tres territorios, especialmente en Álava (pasando del 7 % de vascohablantes bilingües en 1991 a 19,2 % en 2016). Este incremento se debe al número de vascohablantes entre la población joven (71,4 % entre 16 y 25 años).
En el caso de Navarra, este último estudio sociolingüístico realizado en 2016 indicó que para el conjunto de la población de Navarra el porcentaje de vascohablantes activos en mayores de 16 años era del 12,9 % (69 000), además de un 10,3 % (55 000) de bilingües pasivos, frente a un 76,8 % de navarros que eran exclusivamente castellanohablantes.47 Los datos muestran una tendencia de aumentos de vascohablantes activos (3,4 puntos más que en 1991) y especialmente de bilingües pasivos (5,7 puntos más que en 1991) y un descenso de monolingües castellanohablantes (9,1 puntos menos que en 1991). Esta tendencia también se debe al número de vascohablantes entre la población joven (25,8 % entre 16 y 25 años, frente al 10 % en 1991). El conocimiento del euskera en Navarra presenta realidades muy distintas en función de las zonas que estableció la Ley Foral del Vascuence en 1986. Así, en la zona de predominio lingüístico vascohablante de Navarra hay un 61,1 % de vascohablantes activos, mientras que en la Zona Mixta es del 11,3 % y en la zona no vascófona del 2,7 %. Los datos de la VI Encuesta Sociolingüística referidos a Navarra se concretarán más a mediados de este año. En el País Vasco francés,9 según datos de 2016 el 28,4 % de la población es vascohablante y el 16,4 % vascohablante pasivo. La tendencia ha sido de descenso en el número de hablantes debido a un mayor número de hablantes entre la población mayor, si bien se trata de un descenso ralentizado debido a cierto aumento de conocimiento entre la población joven.48
Bibliografía:
Textos e imágenes recogidas de Wikipedia.